jueves, 11 de abril de 2019

Mi único derbi

Mi único derbi
La Mosquitera
Gustavo Adolfo Fernández

Faltan pocos días para un nuevo derbi  entre el Oviedo y el Sporting. Yo soy seguidor del equipo de la capital del Principado, pero en una sola ocasión he visto el derbi en el campo y dudo que vuelva a repetir la experiencia.

En la temporada 1988-89 yo no había cumplido aún los 18 años y los dos equipos asturianos estaban en Primera División. En la jornada 37 tocaba enfrentamiento en el campo del Molinón de  Gijón y para allí me fui con Rafa,  un amigo unos meses mayor que ya tenía carné de conducir y una cirila con una orgullosa pegatina del Real Oviedo.

Una vez en el campo nos fuimos a la zona donde estaban los aficionados carbayones y sacamos al viento nuestras bufandas azules. Poco recuerdo del partido, salvo que empatamos a cero goles y que el portero del Sporting era el moscón Pedro Rodríguez Alfaro. Faltando pocos minutos para acabar el encuentro decidimos marcharnos para evitar follones, pero salir solos fue un tremendo error, a la puerta esperaban ya unos cuantos energúmenos que nos rodearon y empezaron a pegarnos. A mí, me arrinconaron contra el muro del estadio, me arrancaron la bufanda y uno de los golpes me partió el labio. Recuerdo a Rafa tirando de mi brazo y gritándome que corriera. Así lo hicimos y pudimos finalmente zafarnos de nuestros agresores.

Tan nerviosos nos pusimos que nos perdimos con el coche. Estábamos parados en un semáforo, cuando delante de nosotros comenzó a cruzar el paso de peatones el matón que me había partido el labio. Rafa y yo nos miramos un segundo, no había nadie más en aquella callejuela secundaria, podíamos haber salido a vengarnos o acelerar para atropellar a aquel imbécil, pero alguno de los dos dijo “pasamos”. Él también nos reconoció y siguió cruzando la calle nerviosísimo. Nada le hicimos ni le dijimos, cuando el semáforo se puso en verde seguimos nuestro camino.

Querido agresor, ya que “no moriste atropellado” en aquel paso de peatones, espero que hoy, 30 años después, puedas disfrutar del derbi sin agredir ni insultar a nadie. Que gane el mejor, y que el mejor sea el Oviedo.

(Publicado en La Voz del Cubia nº 26 de febrero de 2018)

miércoles, 10 de abril de 2019

Urnas con Flor

Urnas con Flor
La Mosquitera
Gustavo Adolfo Fernández

¿Pero a quién se le ocurre poner las elecciones generales el mismo día de La Flor de Grau? ¿Seremos capaces los moscones de compatibilizar folixa y política el domingo 28 de abril? El mercado tradicional, el Certamen de la Faba, las verbenas y las distintas actividades festivas de esta Primera Flor de Grau coincidirán con una de las jornadas electorales más trascendentales e inciertas de la historia democrática de este país.

Pena me da (y toco madera) de aquellos ciudadanos moscones a los que les toque ser presidentes y vocales de las mesas electorales. Pobres políticos e interventores que no podrán disfrutar de esta feria tan tradicional en Grau. Al resto de vecinos, la incertidumbre política también nos puede amargar La Flor, o quizá sea todo lo contrario y este ambiente festivo local nos sirva para olvidar por un rato, o al menos aplazar, el miedo a lo que pueden depararnos en esta ocasión las urnas.

En todo caso, disfruten ustedes de esta tan peculiar Flor, pero no se olviden de votar. No se despisten, organicen bien su tiempo y que el vermú no impida su derecho al voto. Un derecho que, esta vez más que nunca, yo siento casi como una obligación ciudadana y ética.

Entiendo perfectamente que ir a votar un día de fiesta puede dar cierta pereza. Muchos de ustedes pensarán que es complicado decantarse por uno u otro partido, que ahora hay unos cuantos donde elegir, que ninguno les convence y que todos los políticos son iguales. ¿Están ustedes seguros de esto último? Ojo que la desidia es peligrosa en este caso. Ya saben, si no votan, luego no se lamenten ni se quejen. Mediten bien su voto, vayan el domingo 28 de abril a depositar su papeleta en la urna y luego, sólo luego, por unas horas disfruten de La Flor. Más tarde, cuando se cierren los colegios electorales, tiempo tendremos de respirar aliviados o echarnos a temblar.

(Publicado en La Voz del Cubia nº 39 de marzo de 2019)